Musica Para el Alma

jueves, 25 de agosto de 2016

VIERNES 26 LO QUE ME DICE EL EVANGELIO

LO QUE ME DICE EL SANTO EVANGELIO
Viernes, 26 de agosto de 2016
San Mateo (25,1-13):
(«"¡Que llega el esposo, salid a recibirlo!"»). Diez: cinco necias y cinco prudente es una división. Les entro sueño a todas. El sueño es normal, cuando estoy tranquilo en un lugar esperando algo que no sé a qué hora durante la noche puede llegar, mas lo seguro es que vendrá, en donde esta mi problema en el despertar, si me interesa despertar, si quiero despertar, o si me quedo a esperar que pasen los 5 minutos mas traicionero acostado.  (en mi casa en la mañana suenan todo tipo de alarma en distinto móvil, yo despierto al primer sonido del mío, y me hacen levantar varias cosas, que para mí, son  importante: un tiempo prudente a la oración, mi responsabilidad como padre para que no les coja el sueño, a los que van a trabajar, ni a los que van a la escuela y luego ir al trabajo, pero mis hijos les pasan más de media hora timbrando el móvil y al final no lo escuchan, tengo que llamarlo, pero si tienen que ir a un paseo o a algo que le gusta despiertan ante del sonido del móvil porque les interesa despertar).  Así tengo cinco cosas necias en mi vida que no despiertan muy fácil del sueño, que podría ser el sueño de la muerte, 1 El juicio, 2 El chisme, 3. La murmuración, 4. El miedo, 5. La hipocresía. Son cinco cosas necias que tengo que si llega el Señor de improviso no podre salir a recibirlo, mas tengo cinco cosas prudente a mi favor: 1. Tengo el deseo de ser cristiano, 2. Tengo la esperanza de un día ser cristiano, 3. Tengo la intención de ser cristiano, 4. Tengo fe que si DIOS me lo permite seré cristiano, 5. Tengo el impulso de ir a la luz de la palabra. Señor enseña mi pobre oído a escuchar el sonido dulcísimo de tu palabra, que en medio del sueño, en medio de la noche de mis tinieblas, este una pequeña luz encendida dentro de mí, y que en medio de mi sueño, tenga el deseo de despertar a una vida nueva en ti.  


El que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO