Lecturas
y Evangelio del Jueves de la IV Semana de Cuaresma
03 Abr 2025
Evangelio
*Lectura del santo evangelio según san Juan (5,31-47)*
En aquel tiempo, Jesús dijo a los judíos:
«Si yo doy testimonio de mí mismo, mi testimonio no es verdadero. Hay otro que
da testimonio de mí, y sé que es verdadero el testimonio que da de mí.
Vosotros enviasteis mensajeros a Juan, y él ha dado testimonio en favor de la
verdad. No es que yo dependa del testimonio de un hombre; si digo esto es para
que vosotros os salvéis. Juan era la lámpara que ardía y brillaba, y vosotros
quisisteis gozar un instante de su luz.
Pero el testimonio que yo tengo es mayor que el de Juan: las obras que el Padre
me ha concedido llevar a cabo, esas obras que hago dan testimonio de mí: que el
Padre me ha enviado.
Y el Padre que me envió, él mismo ha dado testimonio de mí. Nunca habéis
escuchado su voz, ni visto su rostro, y su palabra no habita en vosotros,
porque al que él envió no lo creéis.
Estudiáis las Escrituras pensando encontrar en ellas vida eterna; pues ellas
están dando testimonio de mí, ¡y no queréis venir a mí para tener vida! No
recibo gloria de los hombres; además, os conozco y sé que el amor de Dios no
está en vosotros.
Yo he venido en nombre de mi Padre, y no me recibisteis; si otro viene en
nombre propio, a ese sí lo recibiréis.
¿Cómo podréis creer vosotros, que aceptáis gloria unos de otros y no buscáis la
gloria que viene del único Dios? No penséis que yo os voy a acusar ante el
Padre, hay uno que os acusa: Moisés, en quien tenéis vuestra esperanza. Si
creyerais a Moisés, me creeríais a mí, porque de mí escribió él. Pero, si no
creéis en sus escritos, ¿cómo vais a creer en mis palabras?».
Palabra del Señor
*Que la
Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones antes que mis palabras*
(Si yo doy testimonio de mí mismo, mi
testimonio no es verdadero).
*Jesús nos deja ver muy claro, que él no
depende del testimonio de un hombre. Porque él, es el gran testimonio de Dios
Padre, y no hay testimonio más grande que ese, y son las obras que él, ha hecho
son las que dan testimonio de que el Padre, le ha enviado. Y el Padre que le
envió, el mismo Padre es el que da testimonio de su Hijo. Cuando le demos la
oportunidad a la palabra de que habite en nosotros, podremos entrar en la parte
más importante, y es la de ser auténticos creyentes, y encontraremos en la
palabra vida eterna; y la palabra hecha carne en nosotros, nos convierte en
autentico hermanos de Jesús y daremos toda honrar y toda gloria a Dios Padre*
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.